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Ex River

Jugó en el River de Marcelo Gallardo y ahora se sumará al ascenso del fútbol argentino: “Nuevo refuerzo”

Un exfutbolista del Millonario vestirá los colores del conjunto del ascenso.

River
Fuente: Marcelo Larrondo

Durante el ciclo de Marcelo Gallardo, hubo grandes futbolistas que llegaron a brillar y ser claves en River. Casos como los de Julián Álvarez o Enzo Fernández, joyas que están en Europa. Pero, así también se encuentran aquellos nombres que quedaron en el olvido y su presente no es para nada lo que esperaban. Como sucedió con un exjugador que ahora firmará con el ascenso. “Nuevo refuerzo”

Marcelo Larrondo fue uno de esos jugadores que pasó sin pena ni gloria por River. Llegó al elenco que comandaba Gallardo tras un inmejorable andar en Rosario Central. Pero, ahora, su destino es muy llamativo. Porque, nunca logró consolidarse por las lesiones que lo marginaron. Y ahora disputará la segunda división del fútbol doméstico.

“Marcelo Larrondo, delantero de 34 años, es el nuevo refuerzo de Deportivo Maipú y llega desde Audax Italiano”, informaron medios locales en este viernes. Uno de los líderes de la Primera Nacional, intentará sumar calidad para llegar al objetivo de ascender. El ex River o juega desde su desvinculación del club de Chile, en marzo del año pasado.

Larrondo, con la camiseta de Rosario Central tuvo su momento de gran nivel en la Argentina. Pero, ahora volverá después de varias temporadas en el fútbol chileno. Allí llegó a ser convocado por Juan Antonio Pizzi para la Selección de dicho país. Sin embargo, reiteradas lesiones se interpusieron varias veces en su camino. Y su nombre fue relegándose…

Ahora, tendrá la chance de demostrar la experiencia que fue adquiriendo a lo largo de estos años. Y además lo hará en un equipo que promete demasiado. Maipú es el mejor del torneo a nivel puntos. Dirigido por Luis García, Maipú lleva 33 unidades acumuladas en 16 juegos disputados. El arranque en el torneo fue irregular. De los primeros seis encuentros, ganó tres y perdió tres. A partir de ahí, se enderezó y no perdió nunca más.