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River en la Liga

“¿Qué quiso demostrar?”: Mario Alberto Kempes destruyó a Sergio Romero por la pelea del Superclásico

El arquero de Boca sigue siendo bastante cuestionado y el campeón del mundo no se calló nada en las últimas horas.

Mario Alberto Kempes
Fuente: Instagram Romero/Captura TV

Teniendo en cuenta el caliente final que tuvo el Superclásico, es normal que las repercusiones continúan con el correr de la semana. Y uno de los protagonistas es Sergio Romero. El arquero de Boca fue quien empezó la pelea con Agustín Palavecino y recibió algunas críticas. Una de ellas muy dura por parte de un campeón del mundo como Mario Alberto Kempes. “¿Qué quiso demostrar?“.

Una vez que Miguel Borja ejecutó el penal sancionado por la infracción de Agustín Sández a Pablo Solari, el Monumental explotó y arrancó la fiesta por la nueva victoria de River en el Superclásico. Pero al mismo tiempo se dio una batalla campal que será recordada por muchos años. Fue Agustín Palavecino quien gritó el gol en la cara de los futbolistas de Boca y desató la furia de Sergio Romero. Aunque insólitamente no vio la tarjeta roja.

Ahora bien, sí es cierto que el arquero Xeneize quedó en el ojo de la tormenta, y Mario Alberto Kempes lo aniquiló en las últimas horas. “¿Por qué Chiquito Romero, estando a 25, 30 metros, tiene que salir despavorido?“, empezó preguntándose en diálogo con el Twitch de Diario Olé. Y luego explicó su postura sobre los lamentables hechos ocurridos en el Monumental.

“Yo no sé si será hincha de Boca, sentirá la camiseta por el orgullo de estar jugando en Boca, no me voy a meter en eso. Pero simplemente dejalo pasar. Como si ellos no hubiesen hecho lo mismo si metían el penal en ese momento“. De esta manera, el exdelantero Millonario cuestionó a Romero, y como era de esperarse sus declaraciones dejaron tela para cortar.

A su vez, esto no fue todo, ya que si bien también marcó el error de Palavecino, Kempes terminó de liquidar al referente del eterno rival. “Lo que hizo el de River no está bien, pero que venga él para armar ese revuelo es vergonzoso. Y más por él, un jugador de selección, debería ser el más tranquilo. ¿Qué quiso demostrar?“. Así se expresó el campeón del mundo en el 78, y demostró que la polémica todavía sigue.