El plantel de River se encuentra en Estados Unidos realizando la pretemporada para realizar la pretemporada de cada a la segunda mitad de 2021. Sin embargo, el mercado de pases se encuentra en pleno auge, por lo que en las oficinas del Estadio Monumental también se encuentran atentos. Una de las principales preocupaciones es la situación de Rafael Santos Borré, pero en las últimas horas se sumó una situación relacionada a Julián Álvarez.
El delantero cordobés se encuentra en uno de los mejores momentos de su carrera, y así lo muestran sus números. A su vez, la convocatoria a la Selección Argentina para disputar la Copa América lo corroboran. Por sus destacadas actuaciones, muchos clubes de Europa posaron sus ojos en el futbolista de Calchín, como por ejemplo el Ajax, quien en los últimos días preguntó condiciones por el atacante.
Sin embargo, la tarde del lunes encendió las alarmas en River, ya que Aston Villa, de la Premier League, estaría tras los pasos del jugador. Según informaron medios ingleses, el representante de Álvarez se reunirá en los próximos días para negociar una posible llegada del joven a los Villanos. Lo cierto es que por el momento no existe oferta formal, pero se espera que podría arribar una a la proximidad.
El equipo inglés se encuentra armando un equipo de ensueño para acompañar a Emiliano Martínez y Jack Grealish, el emblema del equipo. El equipo de Villa Park ya concretó la llegada de Emiliano Buendía, procedente del Norwich, y ahora sus cañones estarían apuntados a Núñez. Si bien no existe nada concreto todavía, desde la dirigencia del Millonario ya se preocupan por una posible salida.
El desempeño de Álvarez
El delantero tiene uno de los mejores momentos futbolísticos de su carrera. En lo que va transcurrido de 2021, el jugador de 21 años disputó 25 partidos, en los que convirtió seis goles y aportó 10 asistencias. El presente también se refleja en la convocatoria a la Selección Argentina para participar de la Copa América de Brasil. Mientras el joven se encuentra defendiendo la albiceleste, tanto la dirigencia como Marcelo Gallardo suman un nuevo dolor de cabeza.