No hay ningún tipo de dudas de que la salida más conflictiva de todo el ciclo Gallardo fue la de Lucas Pratto. A pesar de haber sido un jugador muy importante en los últimos años, Oso dejó el club por la puerta de atrás. Y después de mucho tiempo volvió a convertir. Lo hizo con la camiseta de Vélez y, en medio de la emoción, sacudió al mundo River con una fuerte acusación. ¿Palo para el Muñeco?
Después de haber tenido un 2018 fenomenal en River, la vida profesional de Lucas Pratto cambió para siempre. En 2019 no logró mantener ese nivel que lo convirtió en figura en la final de la Copa Libertadores ante Boca. Y fue perdiendo terreno en la consideración de Marcelo Gallardo. Ese panorama continuó hasta principios de este año, cuando el delantero se cansó y decidió irse.
Su destino fue el Feyenoord de Holanda, pero tampoco encontró continuidad, y encima sufrió una dura lesión. Concretamente, se rompió el peroné derecho, y debió volver a la Argentina, con la ilusión de tener otra chance en River. Sin embargo, Gallardo no lo tendría en cuenta, y Oso rescindió su contrato en medio de una gran polémica.
Pero lo que más lo enojó al delantero fue que el Muñeco no le comunicó su decisión, ni tampoco se mostró interesado por su estado físico. Finalmente, Pratto fue incorporado por Vélez, y anoche volvió a convertir en el 2-0 sobre Argentinos. Aunque lo más interesante para el mundo River llegaría tras el partido. Allí, Oso dejó salir toda su emoción y lanzó un fuerte dardo.
“Solamente agradecerle a mi familia, a mi mujer, y a Vélez que confió en mí cuando me dejaron tirado en bastantes lugares. Es mi casa“, tiró el delantero, haciendo clara referencia a su inesperada salida de River. Como no podía ser de otra manera, sus declaraciones se replicaron enseguida entre los hinchas, quienes lamentan el fastidio de un jugador muy querido en esta gloriosa era.