Luego de realizar un esfuerzo importante para conseguir salir del Shenzhen de China, Juanfer Quintero regresó a River a comienzos de 2022. En una primera parte, Marcelo Gallardo lo fue llevando de a poco. Y finalmente tuvo la recompensa que tanto necesitaba. En la noche de ayer en el Monumental ante Newell’s, tuvo un partido muy particular.
Desde que Juanfer Quintero arrancó su segunda etapa en River, sabía que no sería nada fácil. Porque en China había estado varios meses parado por una decisión de la confederación de interrumpir la liga local por las Eliminatorias. Más tarde volvió a la competencia y en los días previos a llegar sí había tenido rodaje, pero no el que tanto precisaba el entrenador.
La exigencia de la liga de China poco tiene que ver con la Argentina. Por eso el colombiano primero se niveló físicamente mientras jugaba y demostraba toda su calidad. Luego sufrió una lesión que lo marginó varias semanas de las canchas. Ese fue el momento donde perdió terreno en la consideración de Gallardo. Aunque jamás dejó de ser un jugador importante.
Tal es así que en la mayoría de los partidos lo mandó a la cancha en el segundo tiempo. Su última titularidad había sido ante Huracán en la fecha 6 de la Liga Profesional. Pero su estadía en el campo fue escasa ya que, tras la expulsión de Maidana, el Muñeco reacomodó la defensa y el que salió fue Juanfer. En los siguientes choques tuvo poca participación y no logró desequilibrar.
Pero ante Newell’s por la fecha 13 de la Liga Profesional, vivió un partido muy particular. Y lo necesitaba más que nunca. Porque Gallardo lo colocó desde el comienzo y jugó un partidazo, sumamente completo y sobresaliendo con su calidad. Estuvo 67 minutos, buscó esos pases imposible, se adueñó de la pelota y estuvo presente en casi todos los ataques del equipo.
