Después de la salida de Rafael Santos Borré, los hinchas de River esperaban ver a Federico Girotti con mayor asiduidad en la delantera. Sin embargo, esto no fue así, y Marcelo Gallardo decidió darle prioridad a otros atacantes. En este contexto, el juvenil casi no jugó en el semestre, y los dirigentes tomarían una firme postura respecto a su situación.
A principios de año nadie imaginaba que Julián Álvarez lograría alcanzar el tremendo nivel que está teniendo. Por el contrario, el juvenil que prometía goles y buenas actuaciones era Federico Girotti. A tal punto que hasta le convirtió a Boca en el primer Superclásico del año, y se ilusionaba con ocupar el lugar de Rafael Santos Borré, quien estaba a punto de quedar libre.
Finalmente, el Máquina se marchó a Alemania en junio, y lejos de lo que se pensaba, Girotti no logró ser titular. Si bien sumaba minutos ingresando desde el banco, parecía no terminar de convencer al Muñeco, lo que quedó reflejado en el mercado de pases. El DT pidió por Braian Romero, quien arrancó el semestre compartiendo delantera con Julián Álvarez y Matías Suárez.
Entre ellos tres formaron el ataque de River en casi todos los partidos del actual Torneo de la Liga Profesional. Y luego, cuando Suárez se lesionó, se metió en el once Benjamín Rollheiser. Concretamente, Girotti viene siendo la tercera y hasta la cuarta opción para Gallardo, por lo que no vería con malos ojos cambiar de aire.
“Si no va a tener rodaje, la posibilidad es cederlo a préstamo“, manifestó su representante, Joan Salvans, hace días. Y los dirigentes aceptarían negociarlo en el mercado de pases de enero. De todas formas, la prioridad para Fede es triunfar en River, y antes de decidirse quiere hablar con Gallardo para saber si lo tendrá en cuenta. Si finalmente eso no es así, el delantero dejaría Núñez, ya sea cedido o mediante una transferencia.