River comenzó un nuevo semestre cargado de la triple competencia. Y Marcelo Gallardo tendrá que enfrentar al rival más difícil hasta el momento: las lesiones. Con la intensidad de la sumatoria de partidos, el Muñeco ya sufrió algunas bajas y debe pensar en el rearmado del equipo. A las de Robert Rojas (pubalgia) y Agustín Fontana (desgarro), se le sumó la de Matías Suárez.
El Millonario realizó una gran pretemporada en Estados Unidos, y luego la finalizó en Cardales. No obstante, la carga de cotejos tanto por Liga Profesional, Copa Libertadores y Copa Argentina hace que el conjunto del Muñeco no tenga respiro. Para poder alcanzar los objetivos será fundamental tener en buen estado a los futbolistas, saber cómo y cuándo realizar la rotación.
En este lapso, claro es que Matías Suárez es una pieza fundamental para el funcionamiento de River. No es casualidad que haya sido partícipe parte del 80% de los goles que lleva marcados el Millonario en el semestre. El pasado miércoles por la noche, ante Lanús en La Fortaleza, sufrió una leve inquietud en su aductor izquierdo y decidió salir por precaución.
Finalmente los estudios establecieron que tiene una leve distensión y que el tiempo de recuperación será de una semana. Entonces, quedó completamente descartado para el encuentro ante Huracán y habrá que ver si llega al Superclásico por la Copa Argentina. El mismo se disputará el próximo miércoles 4 de agosto en el Estadio Ciudad de La Plata.
Para el choque ante el Globo, el Muñeco seguramente apele a la rotación, aunque podría realizar un mix y en el segundo tiempo cuidar a los usuales titulares para proporcionarles descanso. Es por eso que, tanto Julián Álvarez como Federico Girotti tienen grandes chances de acompañar a Braian Romero, como así también de jugar los dos juntos.
¿Qué le aporta cada uno?
Por un lado, Araña es un jugador con una técnica particular. Puede jugar dentro del área y así también ser el acompañante de un clásico número 9. Julián puede quebrar un partido con algún destello individual. Por su parte, Girotti es resistencia pura. Si bien puede salir del área para acoplarse con sus pares, la realidad es que su hábitat natural es estar cerca del arco con su olfato goleador.
