Para que un equipo funcione y obtenga títulos es terminante que haya armonía en el vestuario, aun cuando todo parecía adverso y el trabajo del entrenador es clave en esos instantes. Leonardo Ponzio tuvo uno de esos momentos a mitad de año en River, tras recuperarse del Covid, se le detectó una miocarditis. Y para su continuidad, Marcelo Gallardo fue trascendental.
Luego de haberse realizado los estudios correspondientes previos a arrancar la pretemporada, el León presentó una secuela de la enfermedad que sacudió al mundo entero y lo mantuvo alejado de las canchas varios meses. Por lo que todo indicaba que podría retirarse en julio, sin embargo, el DT tuvo una charla y el capitán habló de la misma.
“Cuando me detectaron la miocarditis tenía que hacerme una resonancia por mes, estuve casi dos meses y medio, y no veía la luz. Cuando volvimos de la pretemporada hace seis meses atrás, lo primero era que nos hisoparan para viajar. Yo no me quise hisopar, no me cambié y fui con la idea de decirle a Marcelo que hasta ahí llegaba”, comenzó relatando en el programa Perros de la Calle.
“Yo no iba a poder ir a la pretemporada, iba a tardar más en ponerme en ritmo, y fui a decirle eso a Marcelo. Él no se la esperaba y ahí tuvimos una charla mano a mano en la que me dijo “vos no te podés ir ahora, te necesito. Tomate el tiempo que quieras. A vos te gusta el campo, andate allá, volvé cuando quieras, pero no te podés ir ahora”, detalló.
A lo que luego agregó: “Yo en ese momento esperaba que me dijera ‘gracias por todo’ y eso fuera el empujoncito para terminar. Pero recibí la respuesta que también quería escuchar y que significa que te valoran, que te quieren, que te necesitan dentro de un grupo. Entonces, había una cuestión como que esperaba las dos respuestas y según cuál fuera me iba a acomodar”.