Pasan los días y el nombre de Juanfer Quintero sigue resonando fuertemente. Porque el jugador siempre tendrá su lugar de privilegio en la historia grande de River. Es cierto que un gol o un excelente compromiso no alcanzan para convertir en ídolo a un futbolista y de hecho sería injusto solamente rememorar a Quintero por el gol a Boca en la final de Madrid.
Porque, sin duda alguna, el colombiano es mucho más que eso. Porque en el Millonario también hizo historia por su juego, por sus logros conseguido y también por haber sabido representar a la perfección el estilo emblemático del club, el de la gentileza y el buen juego. Pero negar la jerarquía del segundo gol al Xeneize en el Bernabéu también sería completamente indebido.
El 2019 fue un año agridulce para Quintero, lo inició con la 10 en la espalda y mostrando toda su magia, pero tempranamente se rompió los ligamentos y estuvo varios meses fuera de las canchas. Para fines de ese año y el arranque de 2020 regresó y por lo general comenzaba en el banco y aportaba su clase recién el segundo tiempo, pero…
En marzo, la pandemia hizo que se obstaculicen varias actividades y el fútbol fue una de ellas y antes del regreso de la competición Juanfer ya había decidido dejar Núñez e irse a una liga menos competitiva. Totalmente con menor exigencia como la China, el Shenzhen pagó 6 millones de dólares por el 90% de su pase y se calzó la nueva casaca.
Su paso en China
La realidad es que en el gigante asiático se jugó poco en lo que va del año y el colombiano por su parte disputó 14 partidos -11 de ellos como titular- y no anotó goles oficiales. Hay que remarcar que en China hay complejidades económicas y esta sería una de las claves. Si quiere retornar, debería entablar relación con Núñez y forzar por un préstamo, como mínimo.