Atrás quedaron los rumores sobre una posible lesión, y Julián Álvarez volvió a jugar con la camiseta de la Selección Argentina. Lo hizo anoche ante Brasil en San Juan, en una nueva edición del clásico Sudamericano. Y si bien su ingreso llenó de orgullo a los hinchas de River, también generó gran enojo por una inexplicable decisión de Lionel Scaloni.
Cada convocatoria que pasa, Julián Álvarez parece ganar más terreno en la Selección Argentina. A diferencia de lo que ocurría al principio, de a poco empieza a sumar minutos y experiencia, tal como sucedió en el partido contra Brasil. Después de no haber ingresado ante Uruguay, ya que venía arrastrando una dolencia en el pubis, reapareció en cancha. Y en River miraron atentos.
Corrían 29 minutos del segundo tiempo cuando Lionel Scaloni mandó a la Araña a la cancha, para reemplazar a Ángel Di María. El partido estaba muy cerrado y ninguno de los dos equipos podían romper el cero, por lo que el ingreso de la joya de River provocaba expectativa. Sin embargo, el DT argentino lo puso a jugar en una extraña posición.
Insólitamente, mantuvo el 4-4-2 con el que inició el encuentro, y Araña se paró como extremo derecho, el mismo lugar que ocupó Fideo. Como no podía ser otra manera, los hinchas de River explotaron al entender que se desaprovechó el momento goleador de Araña, quien no pudo desequilibrar. Este malestar se hizo muy notorio en las redes sociales, donde los fanáticos pedían a Julián como centrodelantero.
A su vez, la referencia de área era Joaquín Correa, que había reemplazado a Lautaro Martínez. Y lo increíble es que el ex Estudiantes tiene mayor experiencia en ocupar posiciones más retrasadas. Pero Scaloni decidió poner a Álvarez en un lugar donde ya había demostrado no sentirse cómodo en River. Lo cierto es que el encuentro terminó 0-0 y la selección se clasificó al Mundial de Qatar, la gran ilusión de Julián.