Ángel Labruna es el máximo ídolo de River, y no queda prácticamente ninguna duda de ello. Si bien es cierto que en los últimos años Marcelo Gallardo ha emergido como una figura preponderante, la historia marca que El Feo, como era conocido popularmente, ocupa ese lugar. Y claro está que sus números lo respaldan, y el amor que los hinchas le tienen también.
Máximo goleador de todos los tiempos del club, y por amplia diferencia, el segundo que más ha convertido en el fútbol argentino, con 293, y el que más títulos ha conseguido, tanto en su etapa como jugador como su trayectoria como técnico, con 22. Por todo eso, y claro está que mucho más, Angelito es considerado como el emblema más importante del conjunto de Núñez.
Es por eso que Labruna es amado por todos los hinchas de River, su nombre es sagrado y hasta tiene su propia estatua, la cual estará acompañada por la del Muñeco a partir de diciembre. Durante su época como futbolista, defendió durante 20 años la casaca del Millonario, y fue partícipe en algunos de los mejores equipos de la historia, como por ejemplo La Máquina.
Su último partido
Pero su trayectoria vistiendo La Banda llegó a su fin el 12 de octubre de 1959. En una derrota frente a San Lorenzo, el histórico futbolista le puso un punto final a su prolongado ciclo en el Millonario. Y luego de un breve paso tanto por Uruguay como por Chile, Angelito llegó a Platense en 1961, y ese mismo año le dijo adiós a su carrera como futbolista.
A partir de aquel momento concluyó el camino de alguien que es considerado como uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, no solo en Núñez, sino que a nivel mundial. Y tal es la influencia que ha tenido Labruna que el 28 de septiembre, el día de nacimiento, es considerado como el Día Internacional del Hincha de River.