La historia de River está marcada por la gran cantidad de emblemas que ha tenido. Algunos son más recientes, mientras que otros han ganado esa consideración por todo lo que han hecho en los tiempos de antaño. Y si de ídolos se trata, hay uno que destaca por encima del resto a pesar de la idolatría emergente de Marcelo Gallardo: Ángel Labruna.
El Feo, como era conocido popularmente, es el ícono máximo de todos los tiempos de River, y hay varios motivos que lo justifican. Su brillante paso como futbolista, en el que formó parte de aquel inolvidable equipo llamado La Máquina, y su desempeño como entrenador hacen que hoy en día tenga hasta su propia estatua en las afueras del Estadio Monumental.
Y este 22 de septiembre se cumplen 58 años del debut de Angelito como técnico del Millonario. En aquella oportunidad, los dirigidos por Labruna vencieron a Racing por 2 a 1 con doblete de Artime. A partir de aquel momento comenzó la carrera de quien se convertiría en uno de los entrenadores que más tiempo ha durado en el cargo.
En total, el emblema tuvo tres etapas como técnico. La primera de ellas fue justamente en 1963, en la que no tuvo éxito. Tras pasar por varios clubes del fútbol argentino, volvió a River en 1975, y comenzó su período más ganador. Además de cortar con una racha de 18 años sin conseguir títulos, tuvo cinco consagraciones más.
De este modo, y sumados a los 18 que consiguió como jugador, suma 22 trofeos levantados, siendo así el que más lo ha hecho en la historia del Millonario. Claro está que el amor que los hinchas riverplatenses es inmenso, y es considerado como el ícono más importante de todos los tiempos de la institución de Núñez.