Una hermosa ceremonia se pudo disfrutar en la puerta del Estadio Monumental, sobre la Avenida Figueroa Alcorta. Antes de descubrir la estatua de Marcelo Gallardo, varias figuras y personalidades reconocidas de River se subieron al escenario y le dedicaron unas palabras. Pero luego, él tomó el micrófono y lanzó una frase que conmovió a todos: “No hay posibilidad alguna”
Jugadores del plantel campeón del 2018, dirigentes y su cuerpo técnico dijeron presente. Y en cada uno de esos momentos, Marcelo Gallardo casi que no pudo contener el llanto. Primero, se transmitió una película de su carrera en las pantallas montadas sobre la calle. Se pudieron observar sus inicios en River, los mejores goles que marcó y su etapa dorada como técnico.
“Buenas tardes a todos. Muchas gracias por estar acá. Quisiera tomarme unos minutos para expresar lo que siento en este momento. Cuando venía para acá sabía. Lo único que quiero es agradecer, me siento un privilegiado. Y lo digo hasta con cierta incomodidad. Lo que ustedes hicieron en estos para lograr que esto sea una realidad… No me va a alcanzar la vida para agradecerlo. Hay mucha gente a la que quiero mucho que me acompañó durante toda la vida, durante toda la carrera…”. comenzó.
“Dije que era muy difícil irse de acá. No hay posibilidad alguna de que uno pueda desprenderse de este maravilloso club. Lo que quería expresar con una emoción que me invade muy profundamente es agradecimiento a toda la gente que me acompañó en estee camino. Le estoy agradecido a mi familia, compañeros, grandes glorias de la institución. Este club es grande por su historia, por las glorias…”, dijo y conmovió a todos.
Marcelo Gallardo y un agradecimiento eterno
“Agradecer a los jugadores que me acompañaron en este proceso, a cada uno. Hemos logrado algo muy importante: más allá de la exigencia que nos ha mantenido, en la exigencia está el crecimiento. El club no va a a parar de crecer, es emocionante ver a más de 80 mil almas vibrando. Es algo único, muy difícil de ver y tenemos ese privilegio. Es maravilloso crecer y evolucionar en un país tan difícil”.
“Soy un bendecido de poder ser parte de este club. Quiero agradecer a mis amigos y al cuerpo técnico. Los jugadores me hicieron crecer y ser mejor persona. A los directivos que me dieron la posibilidad de trabajar con total naturalidad. Me sentí muy cómodo y traté de ser exigente para no defraudarlos. A los presidentes, (Jorge Brito y Rodolfo D’Onofrio) a Enzo Francescoli que caminó al lado mío… Ustedes hicieron posible que este homenaje sea realidad. Ustedes, los hinchas. No me alcanzan las palabras para agradecer, los quiero mucho, los voy a amar siempre. Nací en este club y moriré en este club. Soy un privilegiado. Los amo”, cerró.