Connect with us

¿Hola, Qué estás buscando?

River es historia

Capitán eterno: el gran gesto de Leonardo Ponzio con un equipo de rugby en la cárcel

El ídolo del Millonario estuvo con un equipo que se dedica a jugar rugby en un lugar muy particular…

Leonardo Ponzio
Fuente: Instagram @leoponzio_ok

Colgó los botines de manera oficial y espera sumarse a la Secretaría Técnica de River que comanda Enzo Francescoli. Sin embargo, Leonardo Ponzio sigue transmitiendo sus valores por el deporte y sus enseñanzas de vida. Tal es así que hace algunas horas tuvo un gran gesto con un equipo de rugby que tiene una historia muy particular.

Leonardo Ponzio se acercó a dar una charla con los Espartanos, un conjunto de rugby de la cárcel de máxima seguridad de San Martín, provincia de Buenos Aires. El mismo fue formado y desarrollado con el objetivo de “transformar la vida de las personas privadas de su libertad para su integración social y laboral, a través de la práctica del rugby, la espiritualidad y la educación”.

Entonces, la charla de Ponzio fue trascendental para ellos. “Siempre digo que el deporte es muy importante porque educa, enseña valores para la vida“, escribió el eterno capitán en su cuenta de Instagram. Allí, compartió imágenes de ese momento y asumió que “hace mucho que quería visitar a los Espartanos y fue una experiencia única”.

En su visita, Ponzio escuchó a los jóvenes y les transmitió su experiencia, como así también sus valores. Y no sólo se trató de un diálogo grupal. Sino que habló individualmente con varios de los presos para escuchar sus historias. “Me dejaron reflexionando. Tenían ganas de crecer, cambiar, motivados. Creo en las segundas oportunidades y poder elegir cómo avanzar. Las segundas oportunidades siempre están ahí pero hay que buscarlas”, detalló.

Se trata de un equipo de rugby que se creó en marzo de 2009 por Eduardo “Coco” Oderigo en la unidad carcelaria de San Martín. ¿El fin? Incentivar a luchar por “una nueva oportunidad” a través del deporte. Más de diez años después de ese inicio, hay más 600 voluntarios y 3.000 jugadores, ya que el modelo Espartano se replicó en 65 unidades penales, en 21 provincias, 7 países. Hoy hay 80 empresas empleadoras de personas que transformaron su vida.