En el día de ayer, Erik Lamela se convirtió en el primer argentino en ganar el premio Puskas otorgado al mejor gol del año. Sin embargo, el actual jugador del Sevilla no es el primer jugador surgido de las inferiores de River que es reconocido mundialmente gracias a sus individualidades.
Una de las leyendas que portaron la camiseta del más grande es Alfredo Di Stéfano. La saeta rubia obtuvo el balón de oro en dos oportunidades. El galardón le fue otorgado cuando vestía la camiseta del Real Madrid en los años 1957 y 1959. Di Stefano comenzó su carrera futbolística en el millonario para luego convertirse en uno de los mejores futbolistas de la historia.
En 1989 la revista France Football decidió otorgar el Super Balón de Oro al mejor jugador de las ultimas 3 décadas. Di Stefano se volvió a llevar el especial premio escribiendo nuevamente su nombre en las páginas del futbol.
Omar Sívori es otro de los históricos que fueron reconocidos por el mundo entero. El cabezón surgió de River en 1954 y vistió su camiseta durante 4 años. Tras su paso por el millonario emigró a Italia, en donde se convirtió en leyenda. Fue premiado con el balón de oro 1961.
Erik Lamela se suma a este selecto grupo de futbolistas distinguidos mundialmente. Tras su reconocimiento, agradeció al club que lo vio nacer mediante un posteo en Twitter: “Siempre agradecido por haberme formado como jugador y como persona. Gracias!”