La Selección Argentina sub17 había iniciado el Mundial de Indonesia con el pie izquierdo perdiendo ante Senegal por 2-1 en un partido donde mereció mejor suerte. Obligado a conseguir un buen resultado contra Japón, el equipo de Diego Placente se quedó con el triunfo por 3-1, donde aparecieron el Diablito Echeverri y Agustín Ruberto, dos de las joyitas de River.
En el primer tiempo la Argentina fue una tromba y en apenas 10 minutos ya ganaba por 2 -0. El que abrió el marcador fue el Diablito Echeverri, que la clavó de tiro libre en la primera oportunidad que tuvo en el partido. Tres minutos más tarde el Chaqueño combinó con Santi López para terminar asistiendo a Valentino Acuña, que anotó el segundo.
El resto del primer tiempo se vio a la Argentina mucho mejor que Japón, donde el artífice de la mayoría de las jugadas fue el Diablito, quien tuvo un muy buen partido a diferencia de su primera presentación. De todas maneras la victoria no estuvo asegurada hasta el final ya que la Albiceleste no podía concretar las jugadas de peligro que generaba.
En el segundo tiempo se vio a Japón mucho más decidido y fue así que en apenas 5 minutos del complemento logró descontar gracias a Rento Takaoka. Los nipones buscaron llegar a la igualdad y pusieron en apuros a la Argentina que supo aguantar el resultado pero que también desperdició muchas chances para rematar antes el partido.
Ya en el descuento y con un Japón abocado al ataque, Argentina aprovechó una contra y fue Agustín Ruberto quien lanzó un disparo desde afuera del área y con ayuda de un desvió en un defensor japonés logró poner el 3-1 definitivo. Con este resultado el equipo de Diego Placente se encuentra segundo en el Grupo D con 3 unidades y se jugará el pase a la siguiente ronda contra Polonia el próximo viernes.
