River se caracterizó por ser un club que formó una enorme cantidad de jugadores, a lo largo de la historia. Y los últimos años no fueron la excepción, dado que siempre los entrenadores tuvieron la posibilidad de recurrir a las Inferiores para reforzar el plantel de la máxima división. Allá por 2012, fue Matías Almeyda quien posó sus ojos en Federico Andrada.
El atacante se consagró como el máximo goleador histórico de las Inferiores del Millonario. Sin embargo, fue nada más y nada menos que Ramón Díaz quien le dio la oportunidad de debutar en Primera. Y de hecho fue quien apostó por su gran potencial. Pero el fútbol no es matemático y la realidad por aquel entonces, no se compara con la del presente.
En esos tiempos, había menos aguante y mayor exigencia para obtener resultados. Por eso, Andrada no contó con muchas ocasiones para estar en la Primera de River. Si bien jugó 20 partidos con la banda roja, fueron muy pocos los que comenzó en el equipo titular. El propio delantero contó en una entrevista con La Página Millonaria lo que sintió al no ser tenido en cuenta.
Una cuenta pendiente
“No se manejó mi situación de la manera que se tendría que haber manejado. Si yo era el máximo goleador de las Inferiores, creo que como jugador necesité ese mimo o ese apoyo. Y el claro ejemplo hoy es Julián Álvarez, o Driussi en su momento que obviamente cuando empezaron no era grandes figuras sino que fueron llevados de a poco y hoy son lo que son”, comenzó relatando.
Y luego agregó: “A Julián supieron llevarlo. Creo que hay muchos jugadores como yo que no fuimos llevados despacio, necesitaba más tiempo. Tengo la espina de no haber podido demostrar todo lo que podía en el club que me formó y que me dio todo por tantos años. Entiendo la situación que había muchos delanteros. Pero creo que me podrían haber dado ese tiempo”, cerró.