Enzo Pérez es, sin ningún tipo de duda, uno de los mejores futbolistas de la última década de River. No solamente por el aspecto futbolístico, en el cuál destaca mucho, sino que también porque es el representante de los hinchas adentro de la cancha. Por esos motivos, y muchos más, el mendocino es considerado por muchos como un ídolo más.
Resulta que el mediocampista arribó a Núñez para cumplir su sueño de vestir la casaca del Millonario, y los simpatizantes se encariñaron con él inmediatamente. Sus buenos rendimientos en el verde césped, y su sentido de pertenencia, lo han convertido en uno de los emblemas del ciclo de Marcelo Gallardo.
Este jueves, en el duelo ante Aldosivi, Enzo convirtió el segundo tanto de la noche, y cortó una extensa racha negativa. Su último tanto había sido justamente ante el Tiburón, pero en abril de 2019, hace más de dos años. No obstante, con el gol en el Estadio Monumental, aquella marca quedó en el olvido, y el volante utilizó su festejo para desquitarse.
Una vez que se levantó del suelo tras una exquisita palomita, Pérez se dirigió hacia el costado del arco, y pateó una pelota contra el cartel. La celebración llamó la atención de todos, y las señas de desahogo fueron evidentes. Sin embargo, una vez finalizado el encuentro, Enzo explicó qué fue lo que quiso hacer. “Quise tirar la pelota a la tribuna y le pegué tan mal que pegó en el cartel y casi me rebota a mí”, confesó entre risas.
El choque ante Aldosivi tuvo vital importancia para el futuro del equipo en la Liga Profesional de Fútbol. Tras la mala racha de partidos y resultados, los dirigidos por el Muñeco volvieron a pisar fuerte, y sumaron de a tres en su casa. De este modo, River volvió a meterse de lleno en los primeros puestos del campeonato local, y buscará alzarse con el trofeo.