Este domingo, River debutó en la Liga Profesional de Fútbol ante Colón. En el Estadio Monumental, el Millonario se vio las caras ante el Sabalero en el marco de la primera jornada del nuevo campeonato del fútbol argentino. Los dirigidos por Eduardo Domínguez se impusieron al local por 2 a 1 a pesar de haber estado en ventaja a lo largo de casi todo el enfrentamiento.
Si bien es cierto que el rendimiento de los de Marcelo Gallardo no terminó de convencer y preocupa de cara al cotejo ante Argentinos Juniors, ante el conjunto santafesino hubo otro protagonista: el campo de juego. Durante muchos tramos del enfrentamiento, se los vio a muchos futbolistas teniendo constantes resbalones. Además, en algunos momentos claves, se lo vio muy rápido al terreno. Y todo ello se debe, además del abundante riego, al cambio en la composición del mismo.
El 2020 ha sido un año de muchos cambios. No solamente a nivel social, por todo lo provocado por el Covid-19, sino que el club de Núñez tuvo variaciones en cuanto a lo estructural. Resulta que, por el parón en las actividades deportivas, desde la dirigencia de River tomaron la determinación de hacer importantes remodelaciones en el Antonio Vespucio Liberti. El objetivo final de las mismas es la de ampliar la capacidad del recinto.
Sin embargo, a pensar de todos los beneficios tanto estructurales como visuales, el rendimiento deportivo ha decaído evidentemente. Resulta que, con el encuentro de este domingo ante el Sabalero, River alcanzó los once enfrentamientos en el Monumental tras la remodelación. Sin embargo, los rendimientos no han sido los mejores, y el plantel deberá continuar adaptándose a la nueva cancha.
De todos ellos, el Millonario solamente ganó en cinco oportunidades, igualó en dos y cayó en los otros cuatro. De los 33 puntos que se han disputado en Núñez, los dirigidos por Gallardo han sumado solamente 17 de ellos. Los números no terminan de convencer, por lo que desde el cuerpo técnico deberán buscar la forma de revertir el rumbo de las cosas.
