River comenzó su sueño de volver a ganar la Copa Libertadores este pasado martes ante The Strongest en Bolivia. El resultado no fue el imaginado y el rendimiento en general tampoco. Sin embargo, la realidad es que el local aprovechó momentos claves para golpear. Pero, salvo algunos minutos en cada tiempo, nunca dominó claramente al equipo de Martín Demichelis. Tal es así que el partido dejó estadísticas de no creer.
El debut de River ante el conjunto boliviano terminó con una derrota por 3 a 1. Por lo que la visita regresó a Buenos Aires con las manos vacías. Fue un compromiso extraño para el equipo de Demichelis. Claramente estuvo lejos de brillar y en condiciones geográficas adversas como es jugar en la altura. Pero, así también desempeño del equipo fue irregular.
Hubo errores puntuales que hicieron que el local aproveche las ocasiones creadas. Por otro lado, una actuación pésima del árbitro principal que le regaló un penal al local. Además, intervenciones impresionantes del arquero de The Strongest que evitaron que River se ponga en ventaja en un comienzo. Y que, obviamente, se meta en partido luego.
También se vieron jugadas que pudieron cambiar el partido y dos de ellas se dieron en los primeros minutos. Paulo Díaz avisó de cabeza al minuto y Rodrigo Aliendro al siguiente. De haber entrado alguna de esas chances, el desarrollo hubiese sido otro. También el penal marcado para The Strongest marcó un antes y un después.
Ya en el complemento–antes del descuento de River- Pablo Solari tuvo un mano a mano impresionante. Pero, el arquero local se hizo gigante y lo atajó. Los de Demichelis no jugaron un buen partido en La Paz. Pero, más allá de eso, las estadísticas del partido indican que la visita superó de a ratos. Hubo 24 remates de la visita contra 22 del local, la posesión la tuvo con el 60%. 415 pases a favor con una precisión del 84%.
