Después de cerrar las incorporaciones de Álex Woiski, Maxi Salas y Juanfer Quintero, la dirigencia de River volvió a pisar fuerte en el mercado. No solo arregló los arribos de Matías Galarza Fonda y Juan Portillo, sino que también puso en marcha las gestiones por el último gran refuerzo que pidió Marcelo Gallardo, que prometía dejar con las manos vacías al Manchester City.
En un primer momento, se barajó la posibilidad de que River trabaje codo a codo con el City Group para concretar la transferencia, producto del elevado precio que fijó el equipo dueño del pase. Sin embargo, después de sus primeras consultas, el Millonario decidió avanzar en soledad, con la intención de sacar adelante las gestiones por su propia cuenta.
El apuntado en cuestión era Maher Carrizo, figura de Vélez que se consolidaba como una pieza necesaria para Gallardo de cara al segundo semestre. Así, comenzaron los llamados del Millonario para el Fortín, poniendo sobre la mesa los nombres de Manuel Lanzini y Rodrigo Aliendro. No obstante, ni un posible trueque ni la suma que ofreció la Banda movieron la aguja en Liniers.
“Vélez quiere 16 millones por Maher Carrizo y River no pone esa cifra. Además, el chico en Argentina solo quiere jugar en Vélez y pasar a Europa, Vélez no quiere a Lanzini, River no le da a Aliendro y la triangulación con City se cayó“, confirmó Juan Cortese en la mañana del miércoles, descartando esta posibilidad justo antes de que termine el mercado de pases.
¿Terminó el mercado para River?
Con cinco nuevas incorporaciones confirmadas y dos jugadores que regresaron de sus respectivos préstamos, River se prepara para el cierre del periodo de transferencias en el fútbol argentino. Sin embargo, Jorge Brito no se baja del todo, ya que, si consigue cerrar una transferencia al exterior, volvería a la carga para reforzar las zonas sensibles del equipo del Muñeco: no se descarta que se mueva por otro volante central, un lateral izquierdo o un delantero.
