Con la intención de afrontar el segundo semestre de la mejor forma, Marcelo Gallardo armó una lista de nombres para reforzar la parte alta de su equipo. Así, apareció la posibilidad de avanzar por los servicios de Maxi Salas, quien destaca por su calidad y rápidamente quedó en el medio de un tira y afloja entre las dirigencias de River y Racing.
Lejos de quedarse con los primeros sondeos, el cuadro de Núñez pisó el acelerador y elevó una propuesta formal por el delantero de 27 años. Según confirmaron desde Olé, la misma rondaba los 3.5 millones de dólares, un número que la Academia descartó de inmediato. Está claro que el avance no movió la aguja para los dirigentes, aunque sí provocó un llamado de Gustavo Costas para el jugador.
“El entrenador llamó al delantero para estimularlo y lograr que se quede en la Academia. Le hizo saber que lo considera un jugador fundamental”, confirmaron desde el medio citado, dejando en evidencia una charla que le dio un vuelco a la novela. La respuesta de Salas tranquilizó al DT de Racing y, de manera inevitable, obligaría a Gallardo a cambiar de objetivo.
“Maxi le respondió que tiene el deseo de continuar en el club, motivado principalmente por la Libertadores, pero le admitió que a su regreso de las vacaciones esperará una mejora salarial en el contrato que posee hasta fin de 2026”, sentenciaron desde Olé, por lo que estaría todo encaminado para que el atacante renueve su vínculo tras regresar de su descanso.
River quiere a otra figura de Racing
Mientras se aleja la posibilidad de concretar la incorporación de Maxi Salas, River sigue mirando de reojo lo que ocurre en Avellaneda. Con la intención de reforzar la parte baja de su equipo, Marcelo Gallardo tiene en carpeta a Gabriel Rojas; sin embargo, desde Racing se plantaron y dejaron en claro que solo permitirían su salida por su cláusula de rescisión: 10 millones de dólares.

