Durante los últimos días uno de los jugadores que parecía estar cerca de convertirse en refuerzo de River era nada menos que Lucas Alario, quien ya sabe lo que es ser campeón con la camiseta del Millonario. Sin embargo de un momento a otro la operación no avanzó y el que se terminó quedando con los servicios del Pipa fue Inter de Porto Alegre.
¿Qué fue lo que sucedió? En principio Alario tenía la intención de regresar a River, algo que otras veces no había ocurrido. Es por eso que se abrió un canal de comunicación en el que el jugador, hablando cara a cara con la cúpula dirigencial del Millonario mostró sus ganas de pegar la vuelta justo en el momento en el que el club de Núñez busca un delantero.
Lo cierto es que lo que parecía encaminado empezó a trabarse al momento de hablar de números principalmente con el Eintracht Frankfurt, club dueño del pase de Alario. El Pipa viene de varios meses inactivos y de someterse a una operación de rodilla, por lo que ahora mismo para River su estado es una incógnita absoluta más allá de que tiene el alta médica.
Ante esta situación en River dejaron en claro que solo le abrirían las puertas si podía darse la vuelta del atacante en condición de libre o un préstamo para evaluar durante un año cómo es su condición y ver si valía la pena comprar su ficha. Eintracht Frankfurt nunca aceptó una operación de bajo costo para el Millonario y esto terminó de derrumbar todo.
En las últimas horas el que aceleró con fuerza fue Inter de Porto Alegre, que negoció con el club alemán la compra del 60% de la ficha, además de que Chacho Coudet llamó y sedujo a Alario para que se sume a su proyecto. Así las cosas quedó cerrada la llegada del Pipa al Colorado y a falta de la firma es una negociación que ya está confirmada.
