Como suele ser costumbre en los últimos mercados de pases, la dirigencia de River se movió rápido y de la noche a la mañana cerró al primer refuerzo de cara a 2022. Se trata de Tomás Pochettino, quien si bien venía siendo sondeado, nadie esperaba que llegue de forma tan abrupta. Lo cierto es que el volante surgido de Boca será una de las caras nuevas de Marcelo Gallardo. Y ya enloqueció a los hinchas con un palazo al eterno rival.
A esta altura ya queda muy claro qué clase de futbolistas están capacitados para jugar en el River de Gallardo. Y Tomás Pochettino es uno de ellos. Técnico, con buena pegada, sacrificio y dinámica, el mediocampista despertó el interés del Muñeco, que volvió a pedir por él en este fin de año. Así fue como los dirigentes empezaron a negociar y obtuvieron una resolución tan rápida como satisfactoria.
Aunque faltan resolverse algunos detalles, Poche dejará el Austin FC de la MLS y pasará a vestir la banda a préstamo por un año y medio. De esta manera, Gallardo sumará un creativo más a su plantel, a la espera de lo que ocurra con Juanfer Quintero. Lógicamente, su llegada genera ilusión entre los hinchas, además de cierto morbo por su pasado en Boca.
Antes de romperla en Defensa y Justicia y en Talleres, Tomás hizo inferiores en el eterno rival, donde solo disputó un partido de forma oficial allá por 2015. Desde entonces, dejó de ser considerado y relanzó su carrera, a tal punto que ahora tendrá su revancha en otro de los grandes del país. Por supuesto que el jugador está muy ansioso por actuar en River. Y le hizo un particular guiño.
Ni lentos ni perezosos, algunos hinchas Millonarios notaron que Pochettino dejó de seguir en Instagram a toda cuenta relacionada con Boca. Al mismo tiempo que le dio follow a River, su nueva casa. Este gesto no pasó para nada desapercibido, y manifiesta que el volante ya dejó atrás su pasado. Para enfocarse así en el gran desafío de su carrera.