Durante el último mercado de pases de invierno, Adam Bareiro fue uno de los grandes bombazos. Su nivel en San Lorenzo fue el que provocó el interés de Martín Demichelis, por ese entonces, como DT de River. Sin embargo, tras seis meses, terminó yéndose a Arabia por decisión de Marcelo Gallardo. Y en un nuevo partido con Al Rayyan, dejó en claro su increíble presente.
Bareiro llegó a River cuando aun se encontraba Demichelis. Fue uno de los jugadores que mantuvo una larga novela. Es que, lo quería fuertemente para esta temporada, dado que era totalmente de su gusto. Lo que no imaginaban, hasta ese entonces, que luego el panorama cambiaría totalmente en el club y en el futuro del DT.
Porque Demichelis terminó dejando el club tras los malos resultados y en su lugar llegó Gallardo. En ese preciso instante, el nuevo entrenador comenzó con el análisis de los futbolistas que se encontraban en el plantel. Y en un mercado de pases que aun estaba abierto, se dieron movimientos y Bareiro parecía estar en la cuerda floja para irse.
No obstante, Gallardo determinó que quienes salieran de River, a tan solo 40 días de haber llegado, fueran Felipe Peña Biafore y Franco Carboni. Así se mantuvieron Jeremías Ledesma, Federico Gattoni y Bareiro. Los tres fueron considerados en mayor y menor magnitud para encuentros determinantes. Pero, el caso del delantero es más que particular.
El paraguayo fue de los que más minutos sumó, de los que arribó con Demichelis, a lo largo del segundo ciclo de Gallardo. Pero, no convirtió goles. Esto hizo que picara en punta para irse. Y finalmente así se fue al Al-Rayyan a préstamo. Hoy, vive un increíble presente. Porque lleva cinco encuentros al hilo sin poder marcar y en su último choque fue expulsado. Suma simplemente un gol en los 7 cotejos que disputó y que no juegue es una pésima noticia para River. Porque si el paraguayo no rinde en Arabia, seguramente no se ejecutará su cláusula venta.
