Hace algunos minutos terminó un verdadero partidazo entre Real Madrid y Manchester City. Pero a pesar de la lluvia de goles que tuvo lugar en el Santiago Bernabéu, en Argentina el que se llevó todas las miradas fue Pep Guardiola. Resulta que quedó en el ojo de la tormenta por la inentendible decisión que tomó con Julián Álvarez contra el Merengue.
Esta temporada empezó de la mejor forma para Julián Álvarez. Ya que supo hacerse un lugar importante en el once del Manchester City, reemplazando con categoría al lesionado Kevin De Bruyne. No obstante su panorama sufrió un nuevo giro cuando el belga regresó al verde césped: a Pep Guardiola no le tembló el pulso para volver a marginarlo al banco de suplentes.
Así el ex River perdió mucho terreno en la pelea por el puesto y se vio obligado a sumar minutos a cuentagotas en el conjunto citadino. Con esta realidad se toparon los fanáticos millonarios en la tarde del martes, cuando se mostraron atentos al cruce por los cuartos de final de Champions League entre Real Madrid y Manchester City.
Aunque en este partido tuvo lugar una lluvia de goles, parecía el escenario ideal para que el Araña salte al verde césped: Kevin De Bruyne se había quedado fuera por malestar estomacal, mientras que Erling Haaland jugó mal y prácticamente no sacó diferencias. No obstante, Julián seguía viendo la acción desde el banco de suplentes, por lo menos hasta el minuto 87.
Recién en ese momento el español permitió su ingreso, despertando así el enojo de los seguidores riverplatenses en las redes. A pesar de que ya supo hacer maravillas con un puñado de minutos, el oriundo de Calchín apenas alcanzó a tocar la pelota antes del silbatazo final. Un presente bastante injusto, que no va en sintonía con su enorme calidad y proyección.