“Cuatro años juntos. ¡Gracias por todo!”. Estas palabras y una foto grupal le sirvieron a Rodrigo Aliendro como despedida de Colón. Un poste publicado en Instagram el 27 de junio de 2022, tres días antes de que se finalizara su contrato. Un vínculo que fue, en la génesis de lo que pronto se venía para su carrera, ¿cómo fue su particular llegada a River?
Aquella salida de Rodrigo Aliendro desde Colón se había dado en el ruido de un calendario enrevesado: el Mundial comenzó en noviembre obligó a hacerle ajustes que desacoplaron. Pues muchos acuerdos se terminaban -por ejemplo- entre el partido de ida y de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores. El del volante fue uno de ellos.
Si Colón se resistía a perder tan fácilmente a Aliendro para disputar aquella serie frente a Talleres era por su peso determinado y simbólico. Aunque el volante asumió que dejaría el club, no dejaba de ser la figura del primer título del club junto a Leonardo Burian, el Pulga Rodríguez y Christian Bernardi, entre otros.
El paso de Rodrigo Aliendro por Colón
En 97 partidos con Colón, Aliendro aportó algo más que ocho tantos y siete asistencias: completó su proceso de consolidación en la élite del fútbol nacional. Dado que ya había jugado en Atlético Tucumán, también en un nivel auspicioso. Y así demostró que tenía todas las cualidades para ser observado por los grandes clubes de la Argentina.
Y sucedió. Allá a mitad de año de 2022, Independiente y luego Boca acercaron propuestas para tentar a Aliendro. Hubo amago de mudanza a Avellaneda y expectativa en las oficinas de fútbol de la Bombonera por reflotar una intención de fichaje que inicialmente había quedado trunca. Pero quien desempató la pelea entre ambos fue Marcelo Gallardo. Su llamado lo cambió todo y conquistó a Rodrigo para llegar a vestir los colores de River.