En el día de ayer se terminó la primera doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial del 2026 y uno de los partidos más disputados fue el de Venezuela contra Paraguay, donde la Vinotinto se quedó con la victoria en el tiempo de descuento gracias al gol de penal de Salomón Rondón. El tanto del delantero de River significó el peor de los golpes para Guillermo Barros Schelotto.
El Mellizo asumió hace varios meses como entrenador de la Selección de Paraguay con la ilusión de poder empezar una reconstrucción tras varios años de fracasos. Teniendo en cuenta sus laureles y propuesta como entrenador, sumado a una camada de grandes talentos que comenzó a surgir hicieron que la ilusión comenzara a aflorar.
Pero lo cierto es que Paraguay no levanta cabeza y no solo en los resultados, sino también en los rendimientos. El gol de Rondón para la victoria de Venezuela prácticamente que significó una sentencia para Guillermo Barros Schelotto, que por el momento no dejará su cargo, pero que sabe que tiene solamente una vida más en la Selección.
“Atención: a Guillermo Barros Schelotto no lo van a sacar todavía de la Selección Paraguaya, pero se le acabaron las chances. En octubre el combo es Argentina de visitante y Bolivia de local”, afirmó el periodista Bruno Pont. De esta manera queda claro que para el Mellizo será importantísimo conseguir puntos de oro en el mes que viene.
River, una piedra en el zapato
Increíblemente la vida del Mellizo como entrenador parece que tener un estigma con River. En su paso por Boca se topó en varias oportunidades contra el equipo de Marcelo Gallardo, perdiendo la final de la Supercopa Argentina en Mendoza y la final de la Copa Libertadores. Ahora es Rondón, un hombre del Millonario, quien lo dejó en la cuerda floja.