Matías Kranevitter es, sin ningún tipo de duda, uno de los jugadores más emblemáticos del ciclo de Marcelo Gallardo. Con su amor por la camiseta y grandes rendimientos, el mediocampista se ha ganado el cariño de todo el mundo riverplatense. Pero resulta que, sus grandes actuaciones, también lo pusieron en boca de todos, incluyendo a muchos clubes de Europa.
Sin embargo, según le contó a ‘Perfil Bulos’, el Colo no siempre la tuvo fácil, y tuvo varias complicaciones durante su estadía en inferiores. Y uno de los grandes responsables de que Mati hoy en día sea lo que es fue Matías Almeyda. “Cuando River descendió, tuve la suerte de que Almeyda me llevó a la pretemporada. Fue una enseñanza enorme”, aseguró en primera instancia.
No obstante, fue poco el tiempo que el Pelado estuvo en Núñez luego del regreso a Primera División, y el futuro del volante estaba en el aire. Sin embargo, fue el propio entrenador quien se encargó de que Matías continúe en el plantel profesional. “Cuando Matías decidió irse del club, nos mandó a llamar a Balanta y a mí. Nos dijo que se iba a ir, pero que quería que nos quedáramos en el plantel”, manifestó. Y añadió: “¿Quién sabía si Ramón nos iba a ver en la Reserva?”.
Finalmente, Kranevitter logró afianzarse en el equipo, y llegó su estreno. Luego de la renuncia de Almeyda, River se midió frente a Lanús en el Estadio Monumental, y al mediocampista le llegó la tan soñada chance. “Ese fin de semana dirigió Zapata y pude debutar. Siempre pensaba que tenía que estar preparado porque son muy pocas las oportunidades que tocan”, recordó.
Pero su debut no quedó ajeno a casualidad o, en su defecto, cuestiones del destino. “El día anterior bajamos Acevedo, Cirigliano y yo a jugar a Reserva. Jugaron ellos dos, y a mí no me tocó. Y a Ponzio no sé qué le pasó, y me llamaron para concentrar”, reveló Matías. Aquel fue el inicio de uno de los mejores mediocampistas de los últimos tiempos en el Millonario.