Connect with us

¿Hola, Qué estás buscando?

River es historia

Fue la gran promesa de las inferiores de River y ahora vive un triste presente: “Tomé malas decisiones”

Abel Casquete despertaba muchas ilusiones en Núñez, pero su carrera terminó dando un giro inesperado.

River
Fuente: Instagram @abelcasquete11

A esta altura de más está decir que jugar en la primera de River no es algo sencillo, y más aún para los chicos que suben desde inferiores. Es que si bien hay varios que logran dar el salto, luego son muy pocos los que pueden asentarse. Y esto lo entiende bien Abel Casquete, quine asomaba como la gran joya del club hace algunos años, pero ahora vive un triste presente. “Tomé malas decisiones“.

Ni bien llegó a River, Marcelo Gallardo se propuso darle mucha importancia a las divisiones inferiores. Y uno de los primeros chicos que lo cautivó fue Abel Casquete. Con sólo 17 años, el enganche ecuatoriano ya desplegaba su talento en Reserva y se presentaba como la gran promesa del club. Esto también fue observado por el Muñeco, quien lo hizo debutar el 18 de julio de 2015.

Fue una goleada 5-1 sobre Atlético Rafaela, y Casquete pudo destacarse, al punto que se dio el lujo de asistir a Fernando Cavenaghi en uno de sus cuatro goles de esa tarde. Sin embargo, con el tiempo perdió terreno en la consideración del DT, y solo jugó dos partidos más hasta marcharse a préstamo en 2017. “No pude asentarme porque tuve mente de niño. No tenía ningún acompañante, estaba solo“, recordó en las últimas horas en diálogo con Diario Olé.

Barcelona de Ecuador fue el equipo que le abrió las puertas, aunque sólo pudo disputar cuatro encuentros. “Me enojé porque no me pusieron en un partido y me fui”, se sinceró. A partir de allí, pasó por Universidad Católica de su país, Deportivo Morón y Zulia de Venezuela, hasta que recaló en el Coopsol, un humilde equipo de la Segunda División de Perú.

Si bien está claro que nadie imaginaba este presente, Casquete lo toma como una gran posibilidad de relanzar su carrera. Pero de igual forma, sigue arrepentido por no haber aprovechado su talento. “No pude encontrar una guía en ningún lado. Tomé malas decisiones, apuradas, de pendejo. No tenía un soporte que me dijera que estuviera más tranquilo“, reconoció el volante de 24 años.

Su sueño de volver a River

Consciente de sus condiciones y de que todavía es joven, Abel tiene sed de revancha, y sólo piensa en una cosa. “Quiero hacer las cosas bien y volver a un nivel alto para apuntar a ese regreso a River. Es mi anhelo, mi espina“, dijo. Al mismo tiempo que siguió lamentándose por su paso frustrado en Núñez. “La cabeza me jugó una mala pasada. Tuve oportunidades, me fue bien y Gallardo me hablaba mucho, me decía que siguiera así”, señaló. ¿Podrá volver?