Una de las novelas del mercado de pases llegó a su fin. Porque en la mañana de este jueves, Fabricio Bustos se sometió a la revisión médica para firmar su contrato con River. Pero, los detalles de las negociaciones señalan que le entregaron “un millón más” a Inter y así cerrar la compra de la ficha del lateral. Y que terminó saliendo más caro de lo esperado.
Salió más caro
El acuerdo con Inter se demoró bastante porque había una diferencia en la consideración de partidos que Fabricio Bustos disputó en lo que va de la temporada. Debido a que si llegaba al 60%, se activaba una cláusula de renovación automática que extendía el vínculo por un año y medio más. Y demandaba pagar otro precio.
“Se estiró River, pagó 5 millones de dólares, pagó un millón más porque eran 4 millones“, señaló Sebastián Srur en Radio Continental. Sin embargo, se trata de una cifra que esconde algo más. Y que permite apreciar el monto total que los directivos colocaron para darle el gusto a Marcelo Gallardo de tener su segundo refuerzo.
A razón de que se deben considerar los impuestos que el Millonario también afrontó por fichar al lateral. “5 millones para Inter, son 6.5 millones lo de Fabricio Bustos. Por un partido no quedaba libre“, profundizó Hernán Castillo. Es importante mencionar que la cifra pudo haber sido otra. Y que podría haber superado los 7 millones de dólares.
Toda la familia es hincha
“Es un buen momento para volver a Argentina, jugar en River y con Gallardo, a todo jugador le moviliza que lo llame Gallardo, es un plus”, comentó José Bustos, padre del defensor, en charla con Radio La Red. “Estamos emocionados, es un sueño, uno siempre fue hincha de estos colores“, reconoció. Y esto impactó de gran manera en los hinchas.
¿Está para jugar?
Sí. Porque Fabricio Bustos viene de sumar minutos de manera oficial en el empate de Inter ante Palmeiras por la fecha 21 del Brasileirao. En consecuencia, el lateral puede firmar su contrato con River y el próximo sábado debutar contra Huracán en el Estadio Monumental. Algo que es probable por la lesión de Agustín Sant’Anna.