No queda ninguna duda de que Enzo Francescoli es uno de los grandes ídolos del club, y lo será por toda la historia. El uruguayo ha sabido deslumbrar a todos los hinchas con su técnica y sus constantes muestras de talento, las cuales lo han colocado entre los mejores de todos los tiempos a nivel global. Sin embargo, su historia con River es un tanto especial.
En esta oportunidad, el Príncipe dialogó con ‘Ligas mayores’ y recordó su segunda etapa en el club, en la cual se terminó de convertir en uno de los máximos símbolos. “Coincidió que en el Torino fueron todos presos, tomó otra gente el club y tuvieron que liberar los contratos más altos entre los cuales estaba el mío”, aseguró, explicando el contexto, a lo que añadió: “así pude venir a River libre, sino no hubiera podido venir nunca”.
“El primer día que volví estaba impresionado con los chicos jóvenes, no tenían ni barba. Se armó algo muy increíble, porque fue en base a la experiencia que teníamos los más grandes”, recordó. “Después se sumaron otros jugadores importantes y fuimos armando un equipo que terminó siendo muy exitoso. Era un equipo que jugaba bien al fútbol”, continuó Enzo, remarcando que aquel plantel del Millonario estaba plagado de estrellas.
Y justamente durante aquellos años, Francescoli y compañía levantaron la Copa Libertadores de 1996. Y esta vez, al uruguayo le dieron a elegir entre las conquistas de 1996 y la de 2018, frente a Boca. “La que jugué fue fantástica. Volver diez años después, jugarla y ganarla era todo un tema. Esa fue la más disfrutable porque estar en la cancha es único”, aseguró.
No obstante, aprovechó la oportunidad para referirse a la conquista de River en Madrid. “Cada vez que los hinchas de River nos acordamos de diciembre de 2018 te genera una sonrisa. Y generar eso en los millones de personas en las que lo hicimos va a ser imborrable”. Sin embargo, añadió: “pero para mí la más sentida es la que jugué”.