Se transformó en la expectativa del equipo mucho antes de ser titular, imagínense ahora que se ganó el puesto dentro de los once titulares. El Diablito Echeverri arrancó con el pie derecho el 2023 en Reserva de River y se prepara para un año que lo tendrá como protagonista central del equipo de Marcelo Escudero, que debutó con un contundente 3-0 ante Central Córdoba. Sí, se llevó todos los flashes. Pero, su familia también fue protagonista por el emotivo gesto que tuvo en este día.
El Diablito no tardó mucho en demostrar su magia en cancha. Probó con varios remates desde afuera del área, apareció por derecha y por el centro pidiendo constantemente la pelota. Su gran arma para distraer a los rivales con sus movimientos. Luego, se fabricó él mismo el segundo tanto: le robó la pelota a un defensor de Central Córdoba y definió con precisión de derecha para aumentar la ventaja de River.
Recién fue el primer encuentro del año, pero comenzó a forjar una sociedad más que interesante junto a Esteban Fernández. Otro futbolista que Escudero quiere recuperar para volver a llevarlo a su máximo nivel. En redes sociales, los elogios al Diablito ya son una constante y los hinchas disfrutan de ver a la Reserva especialmente por su presencia en el verde césped.
Sí, tuvo una jornada inolvidable y brilló de manera absoluta. No hay duda alguna del nivel y lo que puede dar el Diablito. Sin embargo, hubo otra perlita que dejó este día en el River Camp. Y tiene que ver con la convocatoria masiva de la familia del 10 de la Reserva. Porque todos fueron a ver su primer encuentro oficial en el año para el mimado.
20 minutos antes del inicio del partido, un micro escolar con alrededor de 25 personas se hizo presente en la puerta del predio. “Somos familiares del Diablito“, le dijeron a uno de los encargados de seguridad. Y así estuvo una de las tribunas de la cancha, copada por familiares, amigos y conocidos de Corrientes de la gran promesa del club.