Federico Girotti es uno de los futbolistas que más trascendencia y crecimiento ha tenido en los últimos meses en River. Sus grandes rendimientos hacen que se postule como uno de los posibles reemplazantes de Rafael Santos Borré. Sin embargo, a pesar de tener un presente brillante, sus inicios en el fútbol han sido realmente difíciles, y hasta se ha planteado abandonarlo.
Así lo confirmó en dialogo con ‘ESPN’, en el que reveló cómo fue su estadía por las inferiores. “Tuve una pretemporada en Reserva en la prácticamente no entrenaba y no formaba parte de los partidos ni de los entrenamientos. Prácticamente corría alrededor de una cancha. Yo me agarraba mi bolso de pelotas y me iba a patear o agarraba un reloj y me iba a correr”, mencionó el delantero.
“Después de uno o dos meses, la cuarta empezó a entrenar en Ezeiza y me lo crucé a Gabriel Perrone, que en ese momento estaba manejando la Cuarta. Me invitó a que entrene con ellos, a que por lo menos pueda tocar un poco la pelota y hacer un poco de fútbol”, añadió. Sin embargo, las cosas empezaron a tener otro rumbo a partir de una simple charla: “A las dos semanas apareció Hernán Díaz y tuvimos una charla en la que yo le dije que si me iba a retirar del club quería que fuera jugando en Cuarta”.
Después de esa conversación con el ex futbolista, las cosas mejoraron radicalmente para el jugador. “Empecé a jugar y en ese semestre salí goleador de todas las inferiores. Cuando terminó el año se nos presentó la oportunidad del torneo de Ipiranga y le pregunté a Hernán si podía ir. Le dije que si me tenía que ir quería que fuera jugando ese torneo para poder mostrarme”, recordó. “En el torneo fui goleador y eso fue un impulso para mí”, agregó.
El presente del delantero es brillante, y seguramente hace algunos años no lo hubiera imaginado. Ahora, Girotti se encuentra con el plantel profesional, y dejó una frase para todos aquellos que estén pasando por esa situación. “El mensaje sería nunca bajar los brazos. El tren ya me había pasado una vez en la pretemporada de Punta del Este y no la aproveché. Yo quería seguir jugando en River, quería una revancha, y creo que las cosas se dieron de muy buena manera. Fue feo haberlo pasado, me iba muy triste todos los días a mi casa. Ahora viéndolo desde el otro lado creo que fue algo muy bueno”, concluyó.