Después del golpazo por Copa Argentina, River volvió a protagonizar otra jornada para el olvido. No se encontró con su funcionamiento y jugó un pésimo partido en el Monumental, en lo que finalmente fue derrota ante Gimnasia por 1 a 0. Por esta razón, complicó en exceso su panorama a dos fechas del cierre del Clausura, debido a que ya no depende de sí mismo para clasificar a la Copa Libertadores.
En la noche del domingo, River tenía la obligación de ganar para no perderle pisada a Boca en la tabla anual. Sin embargo, los dirigidos por Marcelo Gallardo quedaron a deber, debido a que apenas disfrutaron de oportunidades contra Gimnasia de La Plata, encontraron numerosas dudas en los metros finales y sufrieron un duro revés en el terreno de juego.
Pasando en limpio, el Millonario no consiguió sumar y quedó tercero en la tabla anual, con 52 puntos. Boca, su próximo rival en el campeonato argentino, actualmente ocupa el segundo puesto con 56 unidades, mientras que Rosario Central se encuentra clasificado a la Copa Libertadores 2026, consiguiendo uno de los dos boletos que otorga la tabla anual.
En consecuencia, si River quiere mantener la esperanza de clasificar de manera directa a la fase de grupos del certamen continental, deberá ganar sus próximos dos compromisos (ante Boca en la Bombonera y Vélez en el José Amalfitani). En ese caso, alcanzaría los 58 puntos, mientras que su clásico rival no debería ganar en la última jornada, cuando reciba a Tigre.
River buscará recuperar piezas
Aunque la lesión de Facundo Colidio está lejos de transmitir sensaciones positivas para el Superclásico, Marcelo Gallardo pretende recuperar dos futbolistas claves. Primero, buscará volver a tener a disposición a Gonzalo Montiel, quien sufrió una leve dolencia y fue preservado. Un poco más compleja es la situación de Sebastián Driussi, ya que viene sufriendo por una distensión que no lo deja en paz.



