Sin dudas, el foco de River está puesto en lo que será tramo final del año y el gran objetivo de la Copa Libertadores, aunque está complicado con el resultado adverso. Pero, en esta línea, el nuevo DT está atento a varios nombres lesionados como es el Pity Martínez. Tras más de 300 días, tuvo un gran regreso ante Defensa y Justicia y los hinchas se volvieron locos.
Lamentablemente, cuando se esperaba que este año sea cargado de presencias y competiciones para el Pity Martínez, una nueva dolencia apareció. Y fue una de las más duras que volvió a sufrir en poco tiempo. El volante se lesionó el pasado 13 de enero en el primer amistoso que disputó River en la última pretemporada en Estados Unidos.
Una vez más quedó en el foco de la escena y quedando sin chance de tener continuidad en los primeros meses del año. Porque, para la sorpresa de todos, el Pity tuvo tres roturas de ligamentos de rodilla en menos de tres años. Entonces, con este panorama bastante desalentador, River puso un plan para que pueda recuperarse. Y una vez que se intervino quirúrgicamente, arranque con labores especiales.
La idea principal era que pueda retornar al verde césped luego de nueve o diez meses posteriores a la operación. Para que así no vuelva a sufrir de estas lesiones que realmente son alarmantes. Y que relega de un largo tiempo a los futbolistas. Es decir que, en este contexto, ya había un estimativo de cuando podría volver a jugar el Pity para hacer delirar a los hinchas de River.
Y se dio tal cual lo pactaron en River: a fines de octubre. Tras estar ponerse a la par de sus compañeros, Gallardo no lo arriesgó rápidamente aunque ya estaba para jugar. Y recién frente a Defensa y Justicia, en la noche de ayer, volvió. Lo hizo de gran manera. Estuvo fino en los pases largos, tuvo varias gambetas y en unos minutos demostró que su pegada sigue intacta ya que casi clava un golazo de tiro libre. Una gran noticia para el DT. Y que le dejará el problema de considerarlo o no como titular de cara a la revancha vs Mineiro.