Después de la igualdad con Newell’s en el Monumental, Marcelo Gallardo y sus dirigidos cambiaron de enfoque. Debido a que iban a afrontar el primer clásico del segundo semestre, contra Independiente en el Libertadores de América. Un encuentro que no solo destaca por la expectativa que despierta en la gente, sino que también tendrá un condimento especial para River.
Aunque apenas empezó hace un par de semanas, el segundo ciclo de Marcelo Gallardo trajo varios cambios. Los más importantes pudieron observarse en los duelos de Copa Libertadores, donde el equipo sacó pecho y superó sin grandes sobresaltos a Talleres. Pero, a pesar de este envión anímico, River no consiguió trasladar tal impronta al campeonato argentino.
Bajo las órdenes del Muñeco, el Más Grande empató sus últimos tres compromisos en la Liga Profesional. Primero contra Huracán, en un partido donde convirtieron Claudio Echeverri y Rodrigo Echeverría. Unos días más tarde apenas se llevó un punto de su visita al Bosque, ya que Gimnasia se mantuvo con vida hasta el final y encontró la igualdad.
Mientras que, hace unos días, tampoco consiguió quedarse con los tres puntos en casa, cuando recibió a Newell’s. Estos resultados evitaron que se sume a la disputa por los primeros puestos del campeonato: cosechó 17 puntos y se ubica decimosegundo. En consecuencia, el encuentro de esta tarde será clave para que escale posiciones y vuelva a meterse en la discusión.
Cabe recordar que le llevará unas cuantas fechas acomodarse, debido a que Vélez, que hasta el momento es el único puntero, le saca 10 puntos. Es por eso que resulta crucial un triunfo en el Libertadores de América, que le permita encauzar su rumbo y dejar las dudas en el camino. Aunque enfrentará a un rival que viene en alza, dado que el Rojo goleó a Godoy Cruz por Copa Argentina en su última presentación.