La vuelta de Manuel Lanzini no ha sido para nada fácil desde su arribo a River a mediados del año pasado. Justo en el momento que firmó su contrato el Millonario se quedó afuera de la Copa Libertadores y solo quedó la Copa de la Liga Profesional para competir, donde ciertamente no mostró su mejor versión y perdió su lugar.
Con la llegada de la pretemporada se renovaron las ilusiones para Manu en este 2024 pero una lesión en el último amistoso previo al inicio de la competencia oficial hizo que todo se demore. Tuvieron que pasar cerca de tres meses para empezar a ver un Lanzini con peso específico, algo que se empezó a ver en los últimos encuentros.
Si bien contra Boca no terminó de gravitar, en los duelos ante Nacional de Montevideo, Instituto y Libertad de Paraguay entró en los segundos tiempos y se mostró fresco, con capacidad para ganar en el uno contra uno y además con visión de juego para conducir cada ataque, ya sea iniciando desde la izquierda o bien en un puesto más centralizado.
Ahora Lanzini comenzó a pujar seriamente por un puesto como titular y parece que está en disputa con dos nombres pesados: Nacho Fernández y Esequiel Barco. Hoy en día parece que Rodrigo Villagra, Rodrigo Aliendro y Claudio Echeverri tienen un lugar casi ganado en el once inicial, por lo que falta una pieza para completar el mediocampo.
Nacho tiene la capacidad de guiar al equipo pero ya perdió el dinamismo de sus mejores épocas, y Barco desborda de energía pero suele perderse en individualidades y mala toma de decisiones, por lo que Lanzini puede terminar siendo una mezcla perfecta entre ambos. Se verá en los próximos encuentros si Manu se termina de ganar un lugar en un puesto clave para Demichelis.
