Durante el último mercado de pases River negoció durante semanas para hacerse con los servicios de Rodrigo Villagra, quien terminó llegando a cambio de una cifra cercana a los 11 millones de dólares para Talleres. Desde entonces el volante central alternó buenas y malas pero lo cierto es que hasta el momento no se adueñó del puesto de volante central.
En lo que va del semestre uno de los puestos donde más rotó Martín Demichelis fue en la posición del cinco, dándole muchos minutos a Nicolás Fonseca y a Villagra, mientras que Matías Kranevitter apareció en nada menos que la final del Supercopa Argentina. Lo que está claro es que el puesto sigue en disputa y también está claro que el ex Rosario Central no está bien físicamente.
El gran problema para Villagra se produjo en el mes de enero. Desde antes que termine el 2023 le había dejado en claro a Andrés Fassi, presidente de la T, que su intención era marcharse. Primero estuvo muy cerca de Rayados de Monterrey, una operación que se derrumbó por diferencias económicas. Cuando apareció River el jugador no lo dudó y se plantó.
Ante este conflicto, Villagra dejó de entrenarse con el plantel de Talleres y empezó a realizar tareas particulares con un profe y a contraturno. Es por esta razón que no tiene una buena base física y es lo que está pagando hoy en día, donde hay encuentros que directamente no los puede terminar y es por ello que termina siendo reemplazado.
Villagra es uno de los jugadores de River que más espera con ansias la pretemporada y también el cuerpo técnico de Martín Demichelis, ya que todas las partes consideran que con una preparación distinta a la que tuvo en enero y febrero, sumado a los meses de adaptación al equipo le servirán para mostrar su mejor versión en la segunda parte del año.