Este pasado viernes por la noche, River se vio las caras con Huracán por la fecha 12 de la Copa de la Liga. El elenco de Martín Demichelis dejó una pálida imagen, una vez más, y terminó en derrota con 1-0 sobre el final. La realidad es que hubo varios puntos bajos en individualidades como en lo colectivo. Pero, además, dejó en el camino un extenso invicto.
River comenzó el partido con total dominio, buscando llegar y golpear. Pero, luego de esos buenos primeros 15 minutos, el elenco de Demichelis sufrió las transiciones de ataque a defensa. El mediocampo ni siquiera logró contener ni tampoco generar. Gracias a Franco Armani y las flojas definiciones del rival, la visita mantuvo el cero por un buen tiempo.
Las mejores oportunidades se le presentaron a River con los cambios. Quien se mostró de manera constante con peligro y audacia fue el Diablito Echeverri. No obstante, Huracán aprovechó en el momento justo y golpeó. Los de Demichelis quedaron mal parados y con Nicolás Fonseca como último hombre: Mazzantti le ganó la carrera y definió con categoría.
River intentó ir con todo en el final, pero no pudo concretar. Esta caída significó que ahora se ubique como tercero en la tabla de posiciones de la Zona A con 21 unidades. Pero, además, fue importante porque perdió finalmente ese invicto que traía consigo durante semanas. Volvió a ver la derrota después de 17 partidos disputados.
En cuanto a los detalles es que: llevaba once compromisos sin perder en el campeonato, con más empates que triunfos (seis contra cinco). Pero, lo más destacado y a la vez preocupante es que apenas ganó tres de los últimos nueve cotejos, algo poco común en River. Y que deja en evidencia las irregularidades del equipo.