Después de las primeras seis jornadas de la Copa de la Liga, River y Boca protagonizarán el primer Superclásico del año. De más está decir que este choque será clave de cara al resto del semestre, debido a que representará un punto de inflexión para el ganador. Con este marco es necesario repasar el presente del clásico rival, que no llega al Monumental de la mejor manera.
Bajo las órdenes de Diego Martínez tras la salida de Almirón, Boca arrancó la Copa de la Liga con un empate. Fue contra Platense, quien le puso las cosas difíciles y le sacó un punto. Luego de ello el conjunto de la Ribera mostró otra pálida versión, en aquella oportunidad ante su gente: empató 1 a 1 con Sarmiento de Junín en La Bombonera y seguía sin encontrar los caminos.
Ya en la tercera jornada encontró su primera victoria, aunque su rival no puso demasiada resistencia: le ganó al Tigre de Néstor Gorosito, que sufrió 5 derrotas tras 6 partidos y se encuentra último. En la cuarta fecha de la Copa de la Liga volvió a tropezar en condición de local, debido a que no pasó del empate con Defensa y Justicia.
Aunque por la quinta fecha le ganó a Central Córdoba, la alegría no le duró mucho: cayó 2 a 1 con Lanús en La Fortaleza. De esta manera llega al Superclásico, mientras que River se encuentra un poco más afianzado en su Zona. Resulta que el equipo de Martín Demichelis ganó 3 partidos y empató otros 3, donde convirtió un total de 12 goles y apenas recibió 2.
River y una chance importante
A raíz del triunfo de Racing en el Libertadores de América, River tiene la oportunidad de volver a mirar a sus competidores desde lo más alto de la tabla de posiciones de la Copa de la Liga. Es que Independiente quedó con 13 unidades, mientras que el Millonario no le pierde pisada con 12. En consecuencia, si los de Demichelis se quedan con los tres puntos volverán a alejarse en la Zona A.