Después de un pálido empate en Santa Fe, River quiere reencontrarse con el triunfo. Por lo tanto, Martín Demichelis optará por su mejor once, y como es costumbre, Esequiel Barco formará parte de él casi con total seguridad. Es por eso que jugará un partido especial contra Independiente, donde podría volver a hacer cumplir la ley del ex: mirá cómo le fue la última vez.
Antes de dar el salto a la Major League Soccer, Esequiel Barco demostró su categoría en el fútbol argentino. Lo hizo con la camiseta de Independiente, donde se consagró en la Copa Sudamericana y se convirtió en uno de los jugadores más determinantes del continente. Por lo tanto, el compromiso de mañana no será uno más para el volante de 24 años.
Sin embargo, no será la primera vez que enfrente a su ex equipo. Resulta que hace algunos meses, estuvo presente en el clásico entre River e Independiente por la Liga Profesional. De más está decir que no pasó desapercibido, ya que los fanáticos millonarios presentes en el Monumental no tuvieron que esperar mucho para gritar un gol suyo.
Fue a los 17 minutos de la etapa inicial, cuando después de un tiro de esquina, la pelota quedó suelta en el punto del penal. Los defensores del Rojo lograron despejarla de manera imperfecta, por lo que le quedó a Esequiel Barco. Desde afuera del área, el volante apuntó y sacó un tremendo fierrazo que se colgó contra un palo.
Así abrió el resultado el Millonario por la fecha 13 de la Liga Profesional. Cabe recordar que sobre el cierre del partido, Miguel Borja aprovechó la fragilidad de la última línea del Rojo y sentenció el trámite. En definitiva, Barco tiene saldo positivo ante su ex equipo, y podría seguir estirando esta estadística tras el clásico de mañana.
Los últimos partidos de Esequiel Barco
Aunque pasaron cerca de dos meses desde su último festejo (contra Argentinos Juniors), Esequiel Barco sigue siendo clave para el equipo de Martín Demichelis. Tal es así que resulta difícil encontrarle un partido flojo en el segundo semestre, ya que a pesar de no convertir, suele dejar alguna que otra perlita que demuestra su jerarquía.