El calendario puso a Martín Demichelis ante un examen complejo. No hay dudas que quedó “demasiado preocupado” ante las dificultades que River repitió frente a Argentinos al defender la pelota parada. Sin embargo, ahora quien visitará el Monumental es Sergio Rondina. Un DT que suele aprovechar ese recurso para lastimar y mantiene una gran particularidad en su Barracas Central.
El gol que Carlos Arce le convirtió a River a la salida de un tiro libre fue la muestra. Dado que fue uno de los cinco que Barracas Central marcó explotando un insumo que le resultó muy productivo. El 29,4% de los goles anotados en los 19 partidos de Rondina al mando de su equipo llegaron por esa vía. Apelando al ingenio para ampliar el catálogo y evitar caer en la predictibilidad del plagio.
En esa línea, durante 2023 expuso gran variedad. Pelotazos pasados al segundo palo para darle actividad a un futbolista en mentirosa posición, desviando la mirada. Y luego incitar con un centro al corazón del área (lo sufrieron Instituto y Estudiantes) y tiros libres al primer palo (se lo marcó Rodrigo Insúa a Estudiantes). Pero, así también ejecuciones cortas para que un segundo jugador filtrara y desparramando marcas y abriendo espacios (como vs Racing).
Entre ellos también estuvo River: los propios futbolistas de Barracas admitieron que Rondina seguramente estaba “contento” por aprovechar esa arma. “La pelota parada, es importante, la trabajo mucho y puede abrir partidos. Es un arma más”, decía Rondina en 2021 en diálogo con Jogo Bonito. Precisamente antes de medirse ante los de Marcelo Gallardo.
Sus futbolistas suelen reconocerle ese trabajo meticuloso, su facilidad para transformar un par de movimientos tácticos en un gol rupturista. Uno que Barracas Central necesita para cortar una sequía de tres partidos consecutivos sin celebrar. Dado que el último fue el de Maximiliano Puig frente a Boca Juniors, por la Copa Argentina.