Este domingo, River dio una nueva demostración de grandeza. En el Cilindro de Avellaneda, el equipo de Marcelo Gallardo dejó sin validez cualquier tipo de especulación sobre la posibilidad de “ir para atrás” y le ganó a Racing por 2 a 1. Y si bien es cierto que esta actitud despertó gran polémica entre los hinchas, Atilio Costa Febre no dudó y dejó en claro su postura: “Deja una lección”.
Durante la última semana, mucho se especuló acerca de la forma en la que el Millonario saldría a jugar el partido. Resulta que si la Academia sumaba de a tres, superaría a Boca en la tabla de posiciones y se consagraría campeón del fútbol argentino. No obstante, eso no ocurrió, sino que fue el equipo del Muñeco quien se quedó con el triunfo.
Sin embargo, esto último no contentó a todos, ya que, con ese resultado, el Xeneize fue quien dio la vuelta olímpica. Es por eso que mediante redes sociales, miles de riverplatenses cuestionaron la actitud de River de haber salido a ganar. No obstante, Atilio Costa Febre no compartió ese reclamo, y así lo hizo saber con su relato.
Costa Febre y los elogios para River
“Atajó el penal Armani. La institución más grande del mundo se llama Club Atlético River Plate. Y el tipo que sembró los todos valores que tienen que ver con el fútbol en ocho años y medio, es el Muñeco Marcelo Daniel Gallardo, alias Napoleón. El escudo por encima de todo, el nombre River allá arriba”, expresó el relator en primer lugar.
Y a continuación, Lito agigantó la figura del Muñeco en el día de su despedida: “Grande Gallardo honesto, cristalino y pulcro. Dejás abajo la coronación de Boca con esta demostración que dieron tus muchachos. Dios quería que te vayas de esta manera, dando ejemplo de honestidad, dando ejemplo de ética, dando ejemplo de moral”.
“No me importa el campeonato de Boca con semejante técnico. No me importa con esta victoria de River. River es lo más cristalino que tiene el fútbol argentino lleno de mafioso, de tramposos y de traidores. River deja una lección para todos los tiempos, desde un tipo único, incomparable, mágico. Desde Napoleón. Andá y volvé Napoleón. Andá y volvé”, cerró.