Es uno de los años más irregulares de River desde que Marcelo Gallardo ocupó el cargo de entrenador. El propio DT lo admite cada vez que tiene la oportunidad de hablar con la prensa. Por eso, hoy por hoy, uno de los objetivos que tiene el equipo es clasificar a la próxima Copa Libertadores de 2023. ¿De qué depende que esto suceda?
Los números actuales no mienten para este River de Gallardo. Eliminado de la edición vigente de la Copa Libertadores en octavos de final y a seis unidades del líder de la Liga Profesional, cada vez quedan menos atajos para conseguir, al menos, una de las metas de mínima: clasificar al torneo más importante a nivel clubes de Sudamérica.
Hoy River tiene tres ventanas para ganarse un lugar en la Copa. La primera -y la que a priori aparece como más lejana- es ganar la Liga Profesional que está en disputa. Hoy se encuentra a seis unidades del puntero del certamen. Pero podría quedar a ocho si Atlético Tucumán gana su partido ante Talleres de Córdoba este lunes por la noche.
Si bien todavía quedan 24 puntos en juego, tiene que darse un sprint final fuera de serie para que el equipo de Gallardo termine conquistando el bicampeonato. La segunda de las posibilidades tiene que ver con la tabla anual. Esta última, es la sumatoria de los puntos cosechados en la pasada Copa de la LPF y la presente Liga Profesional.
Si bien está todavía en puestos de clasificación, los resultados de este fin de semana y los partidos que restan plantean un escenario de mayor incertidumbre. Hoy los elencos que aparecen en zona de Libertadores son Racing (61), River (58) y Gimnasia (57), que tiene un partido menos y podría superar a River. Por su parte, Argentinos (55) también tiene un encuentro por jugar y alcanzaría al conjunto de Gallardo.
Todo muy ajustado para River
La otra vía que tiene River para clasificar a la Libertadores 2023 es ganar la Copa Argentina. El próximo 28 de septiembre enfrentará a Patronato por los cuartos de final del certamen. En caso de superar al club de Paraná, se medirán ante el ganador de la llave que enfrenta a Boca y Quilmes. Del otro lado del cuadro, el hipotético rival en la final saldría del vencedor de los cruces entre Banfield-Godoy Cruz, Talleres y el vencedor de Independiente Vélez.