Cada vez que inicia un semestre, se renuevan las expectativas para los juveniles que vienen peleando desde abajo para ascender de a poco. Sobre todo en clubes como River, donde las grandes joyas que forman parte de la Reserva suelen tener la oportunidad de llegar a Primera División. O, bien, emigrar a otros sitios en busca de minutos y rodaje. Y eso fue lo sucedió hace algunos días.
En las últimas semanas comenzar a darse esos movimientos en las categorías menores del Millonario con algunos futbolistas que dieron el salto. Tres de ellos, subieron desde la Sexta División hacia la Reserva que dirige Jonathan La Rosa. Y ahora tendrán una nueva experiencia con los pibes más grandes en busca de llegar a la máxima categoría.
Los nombres en cuestión son los de Agustín Wierna, el mediocampista izquierdo Joaquín Flores y el centrodelantero Alexis González, todos categoría 2005. Los tres vienen de participar de un certamen internacional junto al Millonario. Formaron parte del combinado Sub 17 que llegó a semifinales de la Generation Cup y se dieron el gusto de ganar un duelo increíble ante el Manchester United.
Desde ahora, los tres ya integran el plantel de Reserva y por esta razón varios chicos de la Séptima (2006) subieron a la Sexta para completar la categoría. Wierna, es un juvenil que juega de 10. Llegó a Núñez con edad de infantiles proveniente de Vélez, donde no quiso continuar. Enganche, con una pegada magistral, tiene como ídolos a Leo Messi y a Juanfer Quintero.
Las grandes joyas de la Reserva River
Flores, nació el 28 de mayo de 2005 en Tucumán. Comenzó a dar sus primeros años en el fútbol en Villa Obrera. Estuvo cerca de fichar en el Decano y también en Argentinos Jrs., hasta que lo vieron los captadores de la banda. Y le consiguieron una prueba en el Millonario. Viajó a Buenos Aires con apenas 9 años y quedó. Desde ese momento, vive en la pensión Adolfo Pedernera.
Por su parte, González nació el 13 de enero de 2005 en Posadas, Misiones. Participó de una prueba que organizó River junto al Club Atlético Posadas en su ciudad natal. Ese día jugó de enganche y de volante central. A los pocos días le anunciaron que tenía que viajar a Buenos Aires y entrenar junto a una categoría de la banda. Hoy por hoy, es centrodelantero.