Tras el Superclásico de la fecha 7, poco se habló de lo ocurrido adentro de la cancha, sino que todos los focos estuvieron puestos en lo que ocurrió en las tribunas. En aquel momento, la interna entre la barra de River llevaba tiempo estando en un momento crítico, pero ese día estalló. El lanzamiento de la bengala marina fue la gota que colmó el vaso, y desde la dirigencia “van con todo” para cortar el problema de raíz.
Algunos días antes del duelo frente a Boca, la policía había detenido a un colectivo que trasladaba a un grupo de “hinchas” a Salta para el partido contra Laferrere. Sin embargo, lo ocurrido el pasado 20 de marzo estaba muy lejos de lo imaginado. Luego de varios días de investigación, tanto la Justicia como el club tomaron cartas en el asunto y apartaron a cientos de barras de las canchas.
En la búsqueda por quedarse con el poder, tanto Los Borrachos del Tablón como la Banda del Oeste pusieron en peligro a cientos de hinchas. Desde la tribuna Sívori Alta, un “hincha” lanzó una bengala marina que, por fortuna, sobrevoló la Centenario Alta. Y ese acto fue la gota que colmó el vaso y, además, el motivo que llevó al Millonario a tomar una fuerte determinación.
De acuerdo a lo que anunció Pablo Carrozza, la dirigencia se cansó de los violentos. “Acabo de cortar con un importante dirigente de River y me asegura que van con todo contra LBDT. Saben que se vienen amenazas y extorsiones, pero aun así no piensan retroceder. La bengala marina fue la gota que rebalsó el vaso. Me dice que quisieron asesinar a un hincha de River”, publicó el periodista.
Recientemente se le aplicó Derecho de Admisión a 319 “hinchas”, quienes ya no podrán ingresar a los estadios de la Ciudad de Buenos Aires. Lo cierto es que las barras siempre fueron un problema en el club, pero Jorge Brito y compañía se cansaron. En consecuencia, quieren eliminar el problema desde la raíz.
