Cuando River avanza y logra sostener el ritmo futbolístico se vuelve muy complejo de detener. Sin embargo, la complicación está en el arranque del equipo. En cada inicio de semestre, Marcelo Gallardo suele repensar, replantear y volver a proyectar el camino. Para agregar a su análisis, estos primeros cuatro duelo de la Copa de la Liga, sus dirigidos mostraron un rendimiento irregular.
Y, claramente, los resultados, más allá de mantener ocupado al DT, exponen una curiosidad. Se trata de que este comienzo es casi similar al de la pasada Liga Profesional. La combinación de resultados, los goles marcados y los recibidos conforman una llamativa coincidencia. Este año, el Millonario empezó perdiendo por 1-0 ante Unión, en Santa Fe…
Mientras que en la competición anterior cayó por 2-1 vs. Colón, en el estadio Monumental. En ambos casos, luego llegó la recuperación y con goleada incluida. Este 2022, tuvo el reciente 4-0 a Patronato se asemejó al 4-1 a Unión. También como local, que se registró en julio del año pasado. La tercera fecha de ambos campeonatos fueron victorias contundentes.
Las dos con vallas invictas y en condición de visitante: 2-0 a Newells en Rosario y 3-0 a Lanús en el Sur. Con doblete de Nicolás De la Cruz y uno de Bruno Zuculini. Y finalmente, en la cuarta surgieron las igualdades: 2-2 ante Racing y 1-1 frente a Huracán, donde River rescató un empate con el tanto de Braian Romero a cuatro minutos del final.
La ilusión que crece entre los hinchas de River
Pasando en limpio, la secuencia marca que en estos dos comienzos, el equipo de Gallardo comenzó con el pie izquierdo. Estampó dos triunfos al hilo y luego logró empates con sabor amargo. En cuanto a los goles, la cosecha es parecida: nueve a favor y tres en contra en la Liga Profesional. Y 8 a favor y cuatro en contra en la actual Copa de la Liga.
