El comienzo del partido entre River y Patronato no fue el mejor. El equipo de Marcelo Gallardo sufrió una mala noticia desde que inició a correr el marcador, porque Felipe Peña salió lesionado y en su lugar ingresó Jonatan Maidana. Pero para la dicha de los locales, los goles empezaron a aparecer. Agustín Palavecino marcó el primero y Julián Álvarez estampó el segundo.
El Millonario llegaba a este compromiso con varias complejidades en la formación. Principalmente, porque el entrenador sufrió bajas en la semana y justamente, de habituales titulares. Paulo Díaz se desgarró, Fabrizio Angileri se resintió y Nicolás De La Cruz continúa con trombosis venosa. Pero hasta último momento, Milton Casco y Robert Rojas también estuvieron en duda.
No caben dudas, que Julián Álvarez es el mejor jugador del fútbol argentino en el presente. El delantero mantiene un presente descollante hace meses. Tanto así que relegó a la experiencia al banco (Matías Suárez lesionado y Braian Romero suplente). Hace fechas, que no se cansa de hacer goles y en esta ocasión, no fue la excepción a la regla.
Luego de un arranque adverso por la situación de Peña, aparecieron los goles de la victoria parcial. El volante estrella que tiene River, Agustín Palavecino, marcó el primero tras un gran zapatazo. Minutos más tarde, el Araña aprovechó el rebote luego de una atajada de Ibáñez y amplió la ventaja para que explote el Monumental con el 2-0.
Liderazgo y necesidad de ganar
El Millonario es el líder absoluto de la Liga Profesional, que actualmente posee 43 puntos y la distancia con sus perseguidores es importante. Aunque, claramente, no hay que relajarse a falta de seis fechas para el cierre del torneo. Y una victoria más ante el Patrón será de vital relevancia para encarar la recta final de la competición local.