Ni bien comenzó el partido frente a Central Córdoba, River tuvo claro que no sería una noche sencilla. Sin embargo, el equipo sacó a relucir toda su jerarquía y, a pesar del sufrimiento, había conseguido ponerse 2-0. Justo cuando parecía que el equipo se encaminaba a una victoria tranquila, Fabrizio Angileri protagonizó un polémico penal para el Ferroviario, el cual hizo estallar a Marcelo Gallardo.
De más está decir que el nivel del arbitraje en el fútbol argentino viene de mal en peor. En todas las fechas del Torneo de la Liga Profesional hay grandes polémicas, y River no queda al margen. A propósito, en el partido de anoche ante Central Córdoba, el juez, Ariel Penel, señaló un llamativo penal que generó grandes discusiones.
Julián Álvarez acababa de poner el 2-0 con un golazo, cuando a los 25 minutos Gonzalo Bettini envió un centro desde la derecha que impactó en la mano de Fabrizio Angileri. Rápidamente, el árbitro marcó penal, entendiendo que el Turco había ampliado el volumen de su cuerpo con su brazo derecho. Sin embargo, en las repeticiones se pudo ver que esto no fue así, y fue el brazo izquierdo el que extendió.
El problema es que existe un gran debate en cuanto al uso de las manos en el área, teniendo en cuenta que el reglamento cambió hace poco. Mientras algunos sostienen que cualquier contacto es penal, hay otros que creen que debe juzgarse la intención. Pero más allá de esto, no hay dudas de que se trató de una jugada muy dudosa, y quedó atada a la interpretación de Penel.
Como no podía ser de otra manera, Marcelo Gallardo y todo River reclamaron. Incluso, luego del partido, el Muñeco se le acercó al réferi para consultarle qué cobró. Lo cierto es que esto poco le importó a Leonardo Sequeira, quien colocó el 2-1 transitorio. A su vez, la buena noticia para la banda fue que Braian Romero liquidó las acciones minutos más tarde. Aunque la polémica ya estaba sobre la mesa.